A la atención del Alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida; para su conocimiento, actuación y respuesta, así como para su posterior traslado al Defensor del Pueblo y a la Fiscalía.
Preguntas sobre el Plan de Movilidad de la Welcome Party y del Mad Cool Festival 2019 de los días 10, 11, 12 y 13 de julio.
El Plan de Movilidad del concierto de Metallica del pasado día 3 de mayo de 2019 fue igual de aciago, nefasto y azaroso que el Plan de Movilidad del Mad Cool del año pasado y, además, sin corrección de errores; pues se han cometido los mismos e incluso más abultados. Como el próximo Mad Cool Festival y la Welcome Party 2019 sean así ya podemos pedir protección en las alturas. Es por esta razón que ponemos en su conocimiento y pedimos también su actuación y respuesta; así como requerimos su posterior traslado al Defensor del Pueblo y a la Fiscalía. Pues de organizaciones como la vivida se puede concluir que en el Mad Cool se masca, se percibe, se huele la tragedia cada vez que lleva a cabo un evento, sea concierto o festival.
Algunos medios de comunicación lo vienen expresando alto y claro desde el 2018. Enunciando que el Mad Cool es un festival que se debía haber frenado, así como afirmando y formulándose las siguientes cuestiones: "Tras tres días sumidos en el caos y el peligro, en los que el público fue tratado como ganado y las condiciones no eran las adecuadas, ¿cuáles son las responsabilidades políticas? ¿dónde estaba el Ayuntamiento para comprobar que todos los protocolos estaban controlados y meditados? ¿Cómo es posible que no se haya auditado cada paso a una empresa con un muerto en su currículo? ¿Cómo es posible que con un pasado como el de esta ciudad, con cinco muertos en el Madrid Arena, se hayan permitido errores garrafales -largas filas en plena solana y tumultos en túneles- que sólo por casualidad no han tenido más consecuencias que la del maltrato al público?"
Las carencias de todos los Planes de Movilidad elaborados hasta ahora para el Espacio Mad Cool fallaban en lo básico, sus carencias eran palpables: no han sido abiertos y participativos para que los agentes implicados puedan proponer sugerencias, la participación directa de los vecinos, pieza clave fundamental de cualquier Plan de Movilidad que se precie en serlo, ha brillado por su ausencia; no basta con que participen y lo conozcan las Asociaciones, hay que implicar a los vecinos, de forma directa y activa, en su elaboración; y no dejar a estos el simple papel de sufridores de la burrada de decibelios de contaminación acústica del festival que el Ayuntamiento de Madrid ignora a pesar de los informes de la policía local que, con mediciones precisas, corroboran esto.
Y si la elaboración de todos los Plan de Movilidad elaborados hasta ahora para el denominado Espacio Mad Cool ha sido pésima, el seguimiento de estos planes y la coordinación de los agentes implicados en cada una de las medidas, así como la detección y aplicación de medidas extraordinarias, ha sido nula; pues no garantizaba lo fundamental, esto es, el fomento de usos que sean más respetuosos con el medio ambiente (son muchas las imágenes tomadas por los vecinos de asistentes al concierto acampando, tirando residuos y miccionando en las zonas verdes de Valdebebas y los vehículos de estos aparcados sobre las mismas. Las ocupaciones de las zonas verdes y parques para aparcamiento de vehículos no sólo impiden o menoscaban la posibilidad de su uso por cualquier persona y el ejercicio libre del mismo, sino que además no parece un uso o destino especialmente compatible con el propio de las zonas verdes especialmente de los parques y jardines); así como la seguridad de los asistentes ni de los vecinos.
Ejemplo claro de esto último, y de estos pésimos Planes de Movilidad, han sido los embudos de personas formados en el túnel bajo la M-11 que conecta, a través de la avenida Alejando de la Sota, los dos recintos, el del Espacio Mad Cool con el del Ifema. Como la prensa viene recogiendo desde el año pasado, cada vez que se celebra un concierto o festival, y como así muestran las imágenes que se adjuntan, son miles y miles las personas atrapadas a la salida, en el trayecto desde el Control de Acceso/Salida Norte al Control al Control de Acceso/Salida Sur; así como gente caminando por la autovía M-11 y coches aparcados y estacionados en ella a la espera de recoger a los miles de asistentes que subían por los taludes laterales al túnel bajo la M-11 que también se aprecian en las imágenes que se acompañan.
Cabe preguntarse ¿qué protección van a tener los días 10, 11, 12 y 13 de julio los 75.000 asistentes diarios a su salida? ¿qué medidas tienen planificadas desde el Ayuntamiento si, como viene siendo habitual, en la caótica salida, con más de 10.000 personas atrapadas en el túnel, se produce alguna avalancha como la que sucedió en el Madrid Arena? ¿por no pensar qué puede ocurrir en esa caótica salida de 75.000 personas si, algún grupo de desalmados, hubiera perpetrado alguna acción como la de Bataclan o la sufrida en el concierto del Manchester Arena? ¿ha valorado el Ayuntamiento de Madrid que, desde el 2004, han sido 14 los atentados perpetrados por grupos yihadistas en suelo europeo que han causado más de 600 muertos en ciudades como París, Londres, Bruselas, Berlín o Niza?
De Planes de Movilidad como los vividos se puede concluir: En el Mad Cool se masca, se percibe, se huele la tragedia cada vez que lleva a cabo un evento, sea concierto o festival.
Esperemos que el Plan de Movilidad de la Welcome Party y del Mad Cool Festival 2019 de los días 10, 11, 12 y 13 de julio no sea igual de aciago, nefasto y azaroso que el Plan de Movilidad del Mad Cool del año pasado.